martes, 10 de septiembre de 2013

"Y dejándolo todo lo siguieron..." Lc 5, 11

¿Sabes para lo que naciste?

Toda vocación tiene como fundamento el llamado de Dios. El hombre viene a la vida porque es amado, pensado y querido por una voluntad buena que lo ha preferido a la no existencia, que lo ha amado antes de que fuese, conocido antes de formado en el seno materno, consagrado antes de que saliese a la luz (cfr. Jer 1, 5; Is 49, 1-5; Gal 1, 15). Para cada uno, Dios tiene un proyecto, un sueño que hay que descubrir y realizar.

La vocación tiene tres elementos: la llamada, respuesta y misión. Dios nos da la libertad para decidir sobre cada una de las acciones de nuestra vida, tenemos el compromiso de darle una respuesta generosa ante la llamada que nos hace, ya que él nos da la vida para que seamos felices.



La vocación es el llamado que el Padre nos hace. En dicho llamado hay tres niveles: la vocación humana, vocación cristiana y vocación cristiana-específica. 



1.- La vocación humana es el llamado a la existencia, a la plena realización, a la felicidad. Es un proceso en el que el ser humano se descubre como persona en relación consigo mismo, con Dios, con los demás y con el mundo que le rodea. (Vocación a la vida)

2.- La vocación cristiana es el llamado a ser hijos de Dios por medio del bautismo. El bautizado no concibe a Dios como alguien lejano, sino la presencia cercana de Cristo que busca a los hombres y les da su vida invitándolos a configurarse con él.

3.- La vocación cristiana-específica: el bautizado, al encontrarse con Cristo, se llena de un amor que no puede quedarse sólo como una idea bonita, tampoco se lo puede guardar para sí, sino tiene que darse y entregarse de una manera específica, debe escoger un camino para vivir la fe: ya sea como laico, como consagrado o como sacerdote.
La vocación cristiana específica es una elección de los bautizados para seguir a Cristo desde un estilo de vida concreto. Estos estilos de vida son: la vocación laical, la vocación a la vida consagrada y la vocación sacerdotal ministerial.
 

Vocación sacerdotal...





Vocación matrimonial...



Vida consagrada...


¿Cómo puedo servir al Señor?


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por su comentario, en breve serán publicadas.
Parroquia Monte Maíz.